Con esperanza vemos cómo avanza el Plan Nacional de Vacunación Covid-19, el que genera tranquilidad en la sociedad chilena. Sin embargo, al analizar su calendarización, llama la atención no encontrar dentro de la población prioritaria al Personal de Seguridad, el que realiza los controles de temperatura y chequeo de permisos en todos los supermercados, centros comerciales, farmacias, tiendas, entre otros. Desde el inicio de la pandemia los guardias de seguridad han tenido un papel protagónico en el control de ingreso y atención de público de las más diversas organizaciones públicas y privadas. Por ejemplo, han controlado, informado y ordenado la presencia y demanda de miles de personas que han concurrido al comercio establecido, con el fin de cubrir, en la mayoría de las veces, necesidades básicas. Esta es una tarea que, sin estar dentro de sus funciones, han realizado rigurosamente y los ha expuesto tanto o más que otros trabajadores que hoy son prioridad en Chile.En un análisis comparado con los planes de vacunación de países vecinos, vemos que en muchos de ellos los colaboradores de la seguridad sí han sido un grupo prioritario contemplado en los programas. Por ejemplo, en Argentina y Colombia el personal de seguridad -entre ellos los guardias-, está considerado en la fase 2, junto al personal de salud y las Fuerzas Armadas, dando de paso una señal de sensibilidad y reconocimiento a su trabajo.Aún estamos a tiempo de poder proteger también la salud de estos trabajadores y, con ello, la de toda la comunidad, puesto que evitará y/o restringirá aún más la diseminación del virus, resguardando las vidas de un incalculable número de personas.

Aldo VidalMiembro del Comité Técnico de ASEVA y General ( R) de Carabineros

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